Este año, hemos decidido celebrar la Navidad de una forma diferente, llevando nuestras sesiones al aire libre para aprovechar la belleza natural de los paisajes y crear un ambiente único lleno de encanto. Entre los tonos verdes del campo y las luces suaves de la temporada, logramos capturar momentos llenos de magia y autenticidad.
Leire fue la protagonista de esta sesión, y su naturalidad y alegría hicieron que cada fotografía reflejara la esencia más pura de la Navidad. Rodeada de naturaleza, cada instante se volvió aún más especial y cercano.
Es una forma diferente de vivir y recordar las fiestas, ¿no os parece? Una mezcla perfecta entre lo rústico y lo festivo, ideal para quienes buscan algo único y personal para sus recuerdos navideños.
